martes, 8 de abril de 2008

Opinión personal

Estoy tan convencida de que las cosas no se hacen solas… nadie hace nada por el otro gratuitamente, porque, lamentablemente eso es muy poco habitual. Muchas veces queremos que las cosas cambien, pero no sabemos de qué manera, y en vez de buscarla, nos quedamos quietos. Ahí es donde yo encuentro la causa de todo esto. Estamos como estamos porque nadie se puso a pensar ¿qué es lo mejor para los estudiantes? Ni siquiera nosotros mismos.

Ahora sabemos que hay un grupo comprometido con un objetivo claro y preciso. ¿Alguien sabe cuántas personas integran ese grupo? Ahora no importa. Lo importante es que ustedes sepan que esas personas no constituyen la cantidad suficiente como para agilizar la implementación de mejoras en nuestra institución. Podemos redactar cartas a las autoridades, a los docentes, hacer encuestas y juntar firmas, pero la fuerza colectiva que genera ese grupo es limitada…. y se gasta si no se alimenta con la fuerza de los demás.

Los cambios a que aspiramos son pensados para el beneficio de todos en nuestra carrera. Aquí no hay egoísmo ni intereses de poder. Sólo la tierna intención de acomodar las cosas. Por lo tanto, insisto, si cada uno de ustedes, no se compromete como pueda con esta causa, no podremos llegar tan lejos como deseamos. Todo aporte es valioso: las propuestas, la creatividad a la hora de manifestarnos, las opiniones, la búsqueda de soluciones… y sobre todo, la presencia siempre.

Por ejemplo, hay docentes que quieren tener opiniones sobre el dictado de su cátedra. Podríamos publicarlas en este blog o armar un gran apunte con opiniones, aunque sean anónimas, puede servir para construir y para conocer dónde nos metemos antes de elegir una cátedra, si es que podemos elegir, claro. De otra forma, nadie se entera que estamos disconformes… peor, nos confunden con un número que pulula entre las aulas, no pueden ver nuestros frutos, nuestras capacidades. Y así, el que resiste, se queda, el que no, abandona la facultad.

Unos datitos y preguntas para dejar picando:

  • Sabían que en nuestro departamento de Artes Visuales, se registró un 75% de deserción estudiantil, desde los comienzos hasta el 2007? ¿No es una barbaridad?
  • Sabían que aún hoy, NADIE del departamento ni de la carrera nos puede decir cuántos son los alumnos regulares de nuestra carrera? ¿Ni tampoco la cantidad exacta de materias y niveles que contiene nuestro astronómico plan de estudios? ¿No les da vergüenza ajena? Tenemos derecho a saber ese dato, pero todavía no lo conseguimos…

Bueno, gracias por leer mi humilde reflexión y por favor, reaccionemos. Podemos estar mucho mejor: “acostumbrarse es morir” (dice alguien por ahí...).

Cinthia (ingresante 2005)